Barcelona 92

«Yo tenía dos años en Barcelona’ 92, pero mis padres fueron médicos voluntarios. Ellos me han trasladado sus recuerdos inolvidables y de ellos aprendí que disfrutar de unos Juegos te emociona el resto de tu vida». Ona Carbonell, doble medallista olímpica en natación sincronizada.

Entre sus deberes, «ser amables, educados, corteses y optimistas». Entre sus derechos, «recibir el reconocimiento social por su acción desinteresada». Cumplieron con lo primero y obtuvieron lo segundo. Barcelona necesitó de ellos antes, durante y después de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos. Fueron parte necesaria e imprescindible de su correcto ...